martes, 11 de agosto de 2009

Sistema de Estrellas

Prologo

El 22 de enero del 2004, Malena Irigaray se suicida en Junín, provincia de Buenos Aires. Un año después escribí un artículo sobre su vida: conté sus desgracias familiares, los fracasos con la literatura, el vagabundeo por el mundo, y el prodigioso encuentro con el cine pornográfico. Pero además, a lo largo del texto, sostuve una hipótesis: Malena Irigaray necesitó del fracaso con la literatura para encontrarse cara a cara con el cine. Unos meses después de que publicara el artículo, la única hermana con vida de Malena, me llamó por teléfono. Dijo que había leído mi ensayo. También dijo que estaba en Buenos Aires.
- Quiero verlo – dijo- tengo algo para usted.
Nos encontramos en un bar cerca de la Chacarita. Me contó que se había divorciado, y que pensaba viajar a Los Ángeles para hacerse cargo de Controversity film grup, la empresa de su hermana. Después sacó un cuaderno.
- Usted fue un poco injusto – dijo y me lo alcanzó.
Era un cuaderno escolar de tapa duras, repleto de anotaciones.
- Échele una mirada – agregó la hermana, después de terminar el café. Y nos despedimos.
El cuaderno de Malena Irigaray era un texto barroco por defecto y no por elección: abundaban las anotaciones circunstanciales, al modo de un diario intimo: me encontré con los directivos de Vivid. Hablamos sobre La trilogía Púrpura. Unos idiotas: creen que el arte cinematográfico es como faenar chorizos. También había lucidas reflexiones sobre el género: una buena actriz porno se define por los ojos, por lo que sabe hacer con sus ojos: encontrar el punto preciso de intersección entre su mirada, la mirada de la cámara y la del espectador. Por momentos el cuaderno se oscurecía: Malena hablaba de las miserias del mundo como si fuera un líder religioso o un profeta desangelado; a veces se enfrascaba en disquisiciones acerca de la filosofía de Martín Heidegger; en especial, Ser y Tiempo. Ahí el texto se volvía más genuino pero menos literario. Los poemas fueron un caso aparte. Eran diez, en total. Y estaban escritos con una caligrafía diferente: el trazado era firme y elegante, con eles que se elevaban hasta sobrepasar el renglón y mayúsculas de dibujos exóticos.
Con el tiempo supe que entre todas esas notas había un libro, no solo un montón de apuntes. El resto fue más o menos sencillo: seleccioné los poemas, y agregué una serie de notas que recopilaban algunas de las reflexiones de Malena.
Ahora, cuando publico este libro, creo entender mi error: lo de Malena Irigaray siempre fue la literatura.

Colegiales, enero de 2008.



Tera Patrick.
(Linda Ana Hopkins Shapiro
25/7/1976 Great Falls, Montana, Estados Unidos)

La boca abierta
los ojos cerrados
filosóficos
la mano se agita
sube, baja
de vuelta: sube, baja
una vez más: sube, baja
aparece la lengua
hace círculos
los labios aplauden
y antes de que puedas entenderlo
mucho antes, siquiera, de soñarlo
como si fuera un garrote en medio de tu cabeza
de golpe, te mira
a vos, que estás a miles de kilómetros de distancia
del otro lado del vidrio.







Jenna Jameson
(Jennifer Massoli
9/4/1974 Las Vegas, Nevada, Estados Unidos)

El mundo del espectáculo ya no es lo que fue
y eso- que no sé si es bueno o malo- se nota
se nota, sobre todo, en la ausencia de brillo
y en consecuencia, las estrellas,
tampoco logran ser lo que fueron
a veces, parecen un pálido resplandor
que se ve, esfumado, sobre las colinas de Hollywood
y las dos o del cartel blanco, están manchadas
rotas, pintadas a medias, con una soga y ropa colgando
algunos juegan un picadito y usan la hache de arco
otros, posan y sacan fotos,
que terminan guardadas en álbumes de colores irrisorios
colores que se pierden con el tiempo
comos las estrellas de Hollywood,
que a esta altura de la vida, ya no son lo que fueron,

salvo ella.

Silvia Saint
(Sylvia Tomčalová
12/2/1976 Kyjov, República Checa)

El mármol es blanco como su piel blanca
y los azulejos son blancos
y el tiempo es blanco.

Ella mueve su cuerpo como si no fuese de ella
con sus piernas
se trepa al cuello del tipo
el tipo, entonces, se contrae
parece caerse, pero no
es un equilibrista.

Con el mundo patas arriba,
ella logra hacer entrar su hombría en la boca
y el negro es tan negro que
al lado de ella, parece blanco.


Ginger Lynn
(Ginger Lynn Allen 14/12/1962
Rockford, Illinois, Estados Unidos)

Entra al set como si entrara en un establo
el piso repleto de cables, las cámaras, las luces
los técnicos dando vueltas de acá para allá
un tipo con un libreta en la mano, dando órdenes
otro tipo, desnudo, con una toalla atada a la cintura, fuma
ella deja caer el desavillé al piso
se pone en cuclillas
y trabaja.

Aunque no parezca, su trabajo es duro:
lograr que el cuerpo se amolde a una imagen
convertir un acto mecánico en un hallazgo poético.
No está claro si lo consigue.







Veronika Zemanová
(
14/4/1975, České Budějovice, Republica Checa)

Habrá que ver si se atreve
todos lo esperan:
los hombres, las mujeres, algunos chicos
y los dioses, por supuesto.

Habrá que ver si al fin se arriesga.

Ella puede imaginárselo
se ve a si misma
en cuatro patas
la cabeza levemente inclinada hacia arriba
la cintura va y viene
aunque no es un movimiento regular
más bien todo lo contrario, un temblor epiléptico
en cualquier momento, explota.

De cualquier modo,
habrá que ver si de una buena vez, se atreve
por ahora es solo una promesa.



Linda Lovelace
(Linda Susan Boreman,
10/1/1949, Yonkers, Nueva York- 22/4/ 2002, Denver, Colorado)

Ella dijo muchas cosas
dijo una mentira evidente:
que se la había pasado de puta madre
y que fue un juego infantil
lo que era otra mentira, por cierto.

Pero algo no dijo, de todos modos.

Después ella dijo otras cosas:
habló de su marido
del modo en que la trató:
era una bestia humana, dijo.
Además, habló de la industria porno
o de eso que llamamos industria porno:
son una manga de inadaptados, dijo.
También habló de las mujeres,
y dijo cosas un poco extravagantes
tal vez sin entender qué era lo que decía.

Y sin embargo,
a pesar de todas sus palabras
hubo algo que ella
nunca dijo.







Racquel Darrian
(Kelly Jackson,
21/7/1968, Hutchinson, Kansas, Estados Unidos)

Si un desprevenido pasa por ahí y la ve,
no lo entiende
es un hecho: es imposible de comprender.

Siendo un poco ortodoxos
y más que nada precisos
diríamos:
no es más que una figura retórica
puesta en una cinta de video,
como si dijéramos
la blanca oscuridad.




Briana Banks
(Briana Bany, 21/05/1978, Munich, Alemania)

Ella es una trabajadora del sexo- dijo el productor-
como en su país: nadie se preocupa por el deseo.
Mueve su cuerpo con una mecánica precisa:
sube, baja, levanta una mano, abre la boca, agarra.
Ella a veces es un hielo- dijo el productor-
no se puede hacer todo lo que hace y seguir pintada.
Vuelve a mover su cuerpo con la misma mecánica:
las manos contra la pared, la cintura en alto, los ojos cerrados.
¿Qué se yo?- dijo el productor- la belleza está muy bien
pero tanto artificio satura, te quema los ojos.
Ella contrae todo los músculos de su cara:
quiere ser un gesto de placer.









Marilyn Chambers
(Marilyn Ann Briggs, 22/4/1952, Providence, Rhode Island, Estados Unidos)

Detrás de la puerta verde no hay nada,
(o si, su belleza de niña bien).
Incómoda, sobre el columpio
con cuatro o cinco tipos al rededor
ella quiere hacernos creer algo ridículo:
que sus manos y su boca están felices
para peor, la imagen se congela
y se carga de un barroquismo inseguro.

Por favor, ¿quién se esconde detrás esa puerta verde?

Georgina Espelvin
(Michelle Graham, 3/6/36, Estados Unidos)

Treinta años después el diablo volvió a meter la cola
y ella, ahora, con uniforme de mucama, sonríe.
Las canas, las arrugas, el andar tranquilo, los ojos.
Ella, ahora, sin esa sangre sobre su cuerpo,
olvidó a Justine, la dejó tirada en la bañera.
Y aunque parezca un poco desencajado
ella, treinta años más tarde, otra vez
volvió a salir con el diablo. Y sonríe.


Notas:

Tera Patrick: Para Malena Irigaray, Tera Patrick era la actriz porno más injustamente menospreciada de la industria. Pocas mujeres – escribió en su cuaderno – gozan de una belleza exótica y al mismo tiempo rotunda.

Jenna Jameson: Malena, en su cuaderno de notas, cuenta que se conocieron en Las Vegas, en una convención de la Industria del Cine para Adultos. Dice que fue en el año 2003. Y que le propuso un papel para una de las películas de la Trilogía Púrpura. Malena cuenta que Jenna se negó de plano; que le dijo: no me gustan tus mamarrachos intelectuales, lo mío es un negocio. Y que ella le contestó: no entendiste nada.

Silvia Saint: Además del poema, hay una sola nota sobre Silvia Saint; dice: el misterio es el color de su piel.

Ginger Lynn: A lo largo del cuaderno existen muchas referencias a Ginger Lynn; una de las pocas actrices de la década del ochenta que parece haber llamado la atención de Malena Irigaray. En todas las notas se percibe fastidio y hasta algo de reproche. Dice: no alcanza con ser rubia y saber hacer una fellatio, hay que dejarse convencer, lograr que la imagen sea una verdadera composición.

Veronika Zemanová: En dos páginas, Malena Irigaray pegó tres fotos de Verónica Zemanová. En cada una de las fotos hizo una anotación: es una lástima, en la primera; tendría que animarse, en la segunda; su cuerpo es un prodigio, en la tercera.

Linda Lovelace: Lo que parece haber fastidiado a Malena Irigaray de Linda Lovelace fueron sus declaraciones. De sus autobiografías dijo: no se puede hacer eso, regalar tu cuerpo, convertirte en celebridad y después jugar a la niña arrepentida, no es justo.

Racquel Darrian: Tal vez la actriz con más anotaciones en todo el cuaderno. Malena Irigaray estaba fascinada con su belleza. Varias veces escribió que era la antítesis de lo que convencionalmente llamamos una actriz porno: delicada, inocente, elegante. En una extensa carta a uno de sus asistentes cuenta su intención de escribir un guión para ella. Algo que le permitiera volver al ruedo con dignidad.

Briana Banks: Después de ver la película con Jenna Jameson, Malena escribe la única entrada en la que hace referencia a Briana Banks; dice: está muy bien, y entiendo su éxito. Sin embargo, hay algo brusco en sus movimientos. Como si no estuviera convencida de lo que hace. No sirve.

Marilyn Chambers: A Malena Irigaray nunca le gustó Detrás de la Puerta Verde. Siempre pensó que era un fiasco, la típica película que solo tiene valor por ser una de las primeras. Y una de las cosas que más parecen haberla enojado es la famosa escena del columpio. Quisieron hacer arte y se confundieron, escribió, el arte es una experiencia liviana que te perfora la vida. Y no al revés.

Georgina Espelvin: Con este texto existe un problema de cronología. El poema hace referencia a la remake de El Diablo en la Sra Jones, dirigida por Paul Thomas y protagonizada por Savana Samson y Jenna Jameson, más la participación especial de Georgina Espelvin. El problema es que la película se filmó en el 2005, un año después de la muerte de Malena Irigaray. Tal vez se trate de un poema apócrifo.

1 comentario:

  1. Que emoción inaugurar los comentarios de tu blog.... a mi el cine porno me pone de mal humor no se algo de celos... igual me sorprende la cantidad de cosas "serias" que se puede decir de un género m enor y que principalmente se usa para la joda, igual me gusta y me divierte como escribis y me etimiula a escribir lo mio. Avantiii. S.H:

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